Por Sergio Spinoza / 14-08-22 Los integrantes del equipo profesional, varonil y femenil, de futbol americano Mexicas llegaron puntuales a la cita, eran las 08:30 de la mañana del sábado, pero esta vez no realizaron los típicos calentamientos ni prepararon su equipo para enfrentar a sus rivales. Esta mañana todo era diferente; cada uno de los jugadores profesionales tomaron sillas, colocaron carpas, marcaron yardas, instalaron mesas y conectaron bocinas, esta vez los héroes deportivos eran niños y niñas que participaron en el torneo infantil “Pilitzintli” organizado por el equipo profesional de Futbol Americano, Mexicas. El certamen atlético, en el que participaron 12 equipos mixtos, se desarrolló en la cancha 1 y 2 de la Confederación Deportiva Mexicana, ubicada en la ciudad deportiva de la Magdalena Mixhuca, alcaldía de Iztacalco en la Ciudad de México. La disputa por el título “Pilitzintli” se desarrolló en 3 grupos de 4 equipos cada uno, en una eliminatoria de todos contra todos, salieron los 4 finalistas; los tres primeros de cada grupo y el mejor segundo lugar fueron quienes pasaron a la siguiente ronda. Cerca de las 14:00 horas, después de una larga jornada de encuentros, se definió quienes eran los cuatro finalistas, por un lado: Devils Flag versus Cobras y por el otro lado Vengadores contra Black Shelbies. Los pequeños de los Devils Flag lograron derrotar a Cobras en un emocionante duelo; mientras que los Black Shelbies harían lo propio con los Vengadores que venían de pasar la serie como el mejor segundo lugar. Así quedaba la mesa puesta para la gran final entre Black Shelbies en contra de Devils Flag. Después de 4 partidos disputados por equipo, en un mismo día, los pequeños jugadores lucían ya cansados, sedientos y hasta con hambre, eran ya las 16:00 horas. El sol estaba a plomo, pero estos guerreros demostraron que podía más su espíritu de competir y sus ganas de ganar que cualquier otra cosa, el triunfo de alguno de los dos equipos estaba cerca. En uno de los campos apenas estaba por empezar la gran final y en el otro ya había comenzado la disputa por el tercer puesto. Por momentos no había para donde voltear, ambos encuentros estaban de pronósticos reservados, de pronto el silbatazo del árbitro dio por finalizado el partido por el tercer lugar, en el que los Vengadores pasaron por encima a las Cobras. Afuera de la cancha, muy atenta a los encuentros y siempre pendiente de la organización, Sabrina Huerta directora de relaciones públicas y parte fundamental en la organización del torneo, comentó lo gratificante que es realizar eventos deportivos en los que participan jóvenes “Estamos muy contentos, se logró el objetivo, vemos a los niños y a las familias muy comprometidos, este torneo “Pilitzintli” es el primero de la temporada, y lo realizamos con la intención de jalar más a los niños al deporte, vemos a los niños habidos de competir y verles esa cara de emoción a los pequeños nos da mucha energía para seguir haciendo más cosas como estas”, dijo la organizadora. Para Huerta y compañía no fue cosa fácil la organización, pues informa que el tratar con grandes grupos siempre es complicado.“Es un orgullo lo de hoy, había quienes no confiaban en el proyecto, pero mira, hay más de 300 personas, estoy feliz, nos falta mejorar muchas cosas, pero es todo un éxito”, agregó Sabrina. UN DUELO DE TITANES En la cancha aún quedaba por definirse la gran final, sobre los integrantes de los dos equipos estaba la mirada de todos los espectadores, incluidos los integrantes de los equipos que horas antes habían sido eliminados que esperaron a pie firme la culminación del torneo. Coaches y jugadores hicieron de todo para quedarse con el trofeo, el partido estaba de y para cualquier lado. Los niños daban cátedra de juego. Devils pegaba primero y ponía las cosas 6 – 0 recién comenzado el partido; poco después los Shelbies emparejaban las cosas 6 – 6; poco antes de irse al descanso los Devils se volvían adelantar y ponían el marcador 12 – 6. Así concluía el primer tiempo. Las porras eran aturdidoras, matracas, tambores, trompetas y cantos de los papás y familiares de los pequeños, no cesaban, se vivía un ambiente digno de una final de cualquier deporte profesional. Llegaba el segundo tiempo y los ajustes de la Coach Vale, de los Shelbies, daban buenos resultados, los de la Gustavo A. Madero entraban con todo y en una combinación de jugadas se ponían 12 – 20, dando una voltereta increíble. Los Devils sacaban las garras nuevamente y se acercaban con un 18 – 20. Se venía la recta final del encuentro y el último partido del día era un escándalo. La batalla ya no era sólo en la cancha, las porras hacían su tarea y competían en ruido, niños y niñas se notaban nerviosos, pero parecía que era su primer partido del día, corrían brincaban, esquivaban y pasaban como si el cansancio hubiera desaparecido. Con un pase largo y 18 – 26 el marcador a favor de Shelbies, parecía que todo estaba decidido; cuando una intercepción de los Devil los metía nuevamente a la pelea, 24 – 26, el encuentro estaba más vivo que nunca y aún no había nada para nadie. Llegó la última jugada, los Shelbies por indicaciones de su entrenadora, jugaban por tierra, cuidando no perder el balón y con él, el resultado. Los jugadores siguieron al pie de la letra las instrucciones y así concluyó la final. El trofeo de la primera edición del “Pilitzintli” quedó en manos de los Black Shelbies. BLACK SHELBIES TRIUNFAN Aun escurriendo de agua y refrescos, con los que fue bañada durante el festejo por parte de sus propios jugadores, la entrenadora del equipo campeón, Valeria Ponce, señaló en entrevista el orgullo de que su equipo recibiera el trofeo. “La final estuvo muy difícil; sin embargo, mis niños demostraron un gran nivel, estaban muy cansados, pero sacaron el carácter y logramos ser campeones” Vale, entrena con su equipo dos veces por