La gimnasta artística continúa recuperándose de la lesión en su pie izquierdo mediante terapias, con la meta de buscar su revancha en Los Ángeles 2028.
Después de una lesión en su pie izquierdo, que empeoró justo antes del inicio de los Juegos Olímpicos de París 2024, la gimnasta Natalia Escalera Cárdenas muestra una buena recuperación gracias a las terapias y a la reanudación gradual de sus entrenamientos.
Su entrenador, Pavel Oceguera, explicó que la atleta de Baja California, quien ganó la medalla de bronce en los Juegos Panamericanos Santiago 2023, se sometió a una resonancia magnética como parte de su seguimiento por la rotura del ligamento plantar, lesión que no requirió cirugía.
“Ya estamos entrenando, tranquilos y bien con buen ánimo, enfocándonos en lo que sigue y aprender de lo sucedido para los nuevos proyectos que apuntan hacia los Juegos Olímpicos Los Ángeles 2028”, comentó.
“Natalia ya se encuentra mucho mejor, inició su etapa de preparación física con un entrenamiento paulatino en aparatos, como las barras asimétricas, en espera de que tengamos autorización de los especialistas para retomar los demás aparatos”, detalló.
Oceguera destacó que, aunque las semanas tras la lesión no fueron sencillas, Natalia mostró valentía y pasión por su deporte y su país. A pesar de competir lesionada, completó entre lágrimas su rutina en las barras asimétricas, obteniendo una puntuación de 12.800, que la colocó en el puesto 52 de 80 gimnastas.
“En un principio sí fue complicado, empezó a trabajar en ello, aceptar lo sucedido y afrontarlo, ahora está con mejor ánimo y con un objetivo claro para 2028. En su momento fue muy difícil, hubo contrastes en decisiones, pero la mía siempre fue apoyarla y ya vendrá nuestra revancha para la siguiente edición”, comentó Pavel Oceguera.
Natalia llegó a París 2024 con molestias en su tobillo izquierdo, después de un campamento de preparación en Madrid, España. La lesión se hizo evidente tras un salto durante su último entrenamiento antes de su debut en los Juegos.
“No me quería quedar sin competir e hice el calentamiento, sabía que llevaba un riesgo y que me iba a doler al caer, me llené de valor porque me dolía muchísimo, respiré y logré hacer mi rutina; fue una decisión propia y fue la correcta porque puedo decir que soy una gimnasta olímpica”, comentó.