Este sábado por la tarde, dentro del marco de la Feria Huamantla se realizó La Final del Certamen Novilleril “Semillero de Ilusiones” en la Plaza de Toros “La Taurina” con Luz Elena llevándose una oreja.
Por Lu Llanos / 13-08-23
Este sábado por la tarde, la Plaza de Toros “La Taurina” sirvió de escenario para realizarse La Final del Certamen Novilleril “Semillero de Ilusiones” organizado por Feria Toro dentro del marco de la Feria Huamantla 2023 donde Luz Elena cortó una oreja al cierra plaza.
Santa Claros abrió plaza con “Tapetero” quien mostró buena técnica y variedad en el capote con lances vistosos que fueron reconocidos por los asistentes.
En la muleta con recursos, probando por ambos pitones, el novillo enrazado y repetía dando lucimiento a la faena. Luego de pinchar, terminó con una estocada casi entera; el novillo recibió palmas en el arrastre y Santana Claros quien tomará la alternativa este martes en Málaga, dio vuelta la ruedo.
El ecuatoriano Juan Palacios “El Pantera” recibió al segundo de la tarde por faroles de rodilla, cubrió el tercio de banderillas causando emoción en los tendidos y siendo ovacionado.
La faena la inició en los medios con dos cambiados de rodillas por la espalda y dos tandas por naturales mostrando ganas y disposición, fue cogido ya casi al final de su presentación sin consecuencias, desafortunadamente la estocada defectuosa le privó de algún premio pese a la petición del respetable, dio vuelta al ruedo donde fue ovacionado.
El tercero de la tarde fue para César Ruiz quien recibió al novillo en tablas; banderilleó poniendo sólo una corta en el tercer par. Con la muleta no pudo estructurar una faena que pudiera calar en los tendidos, pudiendo realizar un par de tandas por derecho que fueron aplaudidas. La estocada contraria en el primer viaje y una segunda en buen sitio, luego de escuchar un aviso, le valió sólo para escuchar leves palmas.
Luz Elena cerró plaza con “Huamantleco” al que recibió con dos largas de rodillas para realizar un par de verónicas y chicuelinas que fueron reconocidas.
Le costó acoplarse al novillo exigente no pudiendo encontrar sitio, pegó una tanda por derecho que gustó a los tendidos, luego de un pinchazo, colocó la espada en buen sitio, ligeramente tendida, lo que le valió el corte de una oreja.
