Por Ricardo Valseca / 05-03-23
La peleadora mexicana Alexa Grasso, ha hecho historia al derrotar a Valentina Shevchenko en la T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada, en el UFC 285. La peleadora mexicana venció gracias a su estilo agresivo, lo que le permitió coronarse Campeona Mosca, gracias a un castigo brutal, mismo que provocó la sumisión de su oponente kirguisa.
Alexa se convirtió en la primera mexicana en conquistar un título mundial de UFC, en uno de los shows principales de la compañía. En el primer episodio, ambas guerreras se estudiaron, aunque la de Guadalajara pudo sorprender a Shevchenko, luego de eludir algunas patadas y jabs, logró conectar un buen golpe en la nariz, lo que derivó en el sangrado por un corte de la oriunda de Biskek, Kirguistán.
En el segundo asalto se vino la contra, pues Valentina intentó con un castigo terminar la batalla; en primera instancia, Alexa, con mucho esfuerzo logró desprenderse y, en los segundos finales igualó la contienda. Sonada la campana del tercer capítulo, Grasso parecía estar en aprietos, porque recibió una patada y un jab en el rostro, para después recibir un derribe para buscar la rendición, aunque la guerrera jalisciense se mantuvo con vida.
Faltando poco para terminar el tercer asalto, Alexa Grasso se volcó al ataque de forma cautelosa pero precisa; luego de esquivar una patada giratoria, consiguió llevar a la lona a Valentina Shevchenko para enseguida aplicarle un mataleón, que terminó en la sumisión de su contrincante, decretando su victoria.
Finalizado su encuentro, con el cinturón en las manos, la mexicana no podía creer lo que había logrado al decir “por favor, pégame porque creo que estoy soñando. Yo había soñado durante mucho tiempo en este momento y solo quiero agradecerle a todos los que están aquí”.
Alexa Grasso también tomó el tiempo para hablar sobre su gran movimiento que le dio la victoria, “yo entrené ese movimiento, lo entrené por mucho tiempo, lo practiqué cada día. Sabía que ella iba a lanzar esa patada reversible. Sabía que ella pega muy fuerte y es una gran atleta y agradezco mucho que haya hecho ese movimiento porque lo entrené con mucho esfuerzo como nunca en mi vida”.
Para finalizar, la peleadora se mostró agradecida con sus entrenadores, y destacó que se siente “bendecida por tener a este equipo”. Tras esta victoria, Alexa Grasso tiene un registro de 16 triunfos, cuatro de ellos por la vía del nocaut, uno por la sumisión y tres derrotas, números que le valen para denominarse la campeona mundial de la categoría mosca en el UFC