Por Ricardo Valseca / 17-02-23
En el último día de test en Sebring, el mexicano «Pato» O’Ward lideró las pruebas de la IndyCar antes de la carrera inaugural de la temporada, el Gran Premio de St Petersburg, superando a sus compañeros del equipo Arrow McLaren-Chevrolet. O’Ward rodó en el trazado corto de 1,7 millas de Sebring en 51,882 segundos.
El tiempo del mexicano fue alrededor de un cuarto de segundo más rápido que su nuevo compañero de equipo Alexander Rossi y que su compañero de equipo más veterano Félix Rosenqvist, que rodó una décima más atrás. Los tres fueron capaces de superar a Felipe Nasr, el as de los coches deportivos de Porsche Penske Motorsport.
Por su parte, Santino Ferrucci fue el quinto más rápido hoy para AJ Foyt Racing-Chevy, antes de su primera temporada completa en IndyCar desde 2019. Quedó justo por delante del neozelandés de 28 años Nick Cassidy, campeón de la Super Fórmula en 2019, que probaba por primera vez un IndyCar al volante del Chip Ganassi Racing-Honda de Alex Palou, campeón en 2021.
Así mismo, el debutante y graduado de Indy Lights en el segundo coche de Foyt, Benjamin Pedersen, fue el octavo más rápido. Desafortunadamente, el Penske-Chevrolet #22, que fue equipado con un sistema híbrido en preparación para la temporada 2024, se detuvo muy temprano en las pruebas, dejando al bicampeón y actual campeón Will Power muy cerca de sus números durante gran parte del día, al igual que en la prueba del lunes.
Sin embargo, Power consiguió una vuelta de 53,693 s, a 1,9 s del ritmo de O’Ward, en su 14ª y última vuelta. Teniendo en cuenta que el coche es más pesado que la maquinaria no híbrida en acción, su distribución de pesos es incorrecta, y que Chevrolet insistió en que la prueba consistía en aprender el hardware y el software relacionados con el dispositivo híbrido en lugar de intentar marcar vueltas rápidas, el ritmo podría considerarse alentador.
