Por Ricardo Valseca / 24 11 2022 La historia de los Mundiales es muy extensa, pero hay datos que no podemos pasar por alto. Así, como vimos en la primera entrega de «Lo que no sabías de los Mundiales», los récords siguen rompiéndose y las historias continúan haciéndonos vibrar, es por eso que ahora te hablaremos de lo que seguramente no sabes y que sucedió entre los mundiales de Argentina 1978 y Rusia 2018. 70’s Y 80’s: GOLES, AUTOGOLES, GOLES ANULADOS Y «LA MANO DE DIOS» El mundial de Argentina 1978 presenció los tres primeros autogoles anotados por Eskandarian, de Irán, frente a Escocia; Vogts, de Alemania, contra Austria, y Brandts, de Holanda, frente a Italia. Brandts a su vez, se convirtió en el primer jugador en anotar un autogol y un gol en un mismo partido en la historia de las copas. Otro holandés que marcó historia fue Rob Rensenbrink, al hacer el gol número 1.000 de los mundiales en un penal frente a Escocia. Por su parte, Túnez logró el primer triunfo de un equipo africano en una fase mundial de una copa del mundo. Mientras que el francés Bernard Lacombe, anotó un gol a los 36 segundos de iniciado el juego en el partido en el que Francia cayó ante Italia por dos a uno. Pero lo que más llamó la atención de los aficionados, fue que, en el partido ante Hungría, el equipo de Francia olvidó sus camisetas y jugó con las del equipo argentino de Kimberley de Mar del Plata. Pasamos a España 1982 donde, por primera vez, los países participantes pasaron de 16 a 24, con la presencia de representantes de los cinco continentes. Además, se registró la máxima goleada de todos los tiempos, protagonizada el 15 de agosto en el duelo entre Hungría y El Salvador, donde los húngaros marcaron 10 goles a 1. Además, Antonio Cabrini de Italia, fue el primer jugador en fallar un lanzamiento penal en una final de la copa del mundo. Durante el partido entre Francia y Kuwait, de la primera fase, se produjo una de las situaciones más extrañas de la historia de los mundiales; tras la anotación de un gol francés, el jeque Fahid Al-Ahmad Al-Jaber Al-Sabah, entró a la cancha a reclamar la legitimidad del gol, a lo que el árbitro Miroslav Stupar, de la Unión Soviética, accedió y anuló el gol. Esto provocó que la FIFA expulsara de por vida al colegiado soviético. En 1986, México volvió a ser sede de este magno evento con lo que se convirtió en el primer país en realizar en dos ocasiones una copa Mundial, siendo la primera vez en 1970. En este Mundial vimos el debut de Canadá, sin embargo, se fue a casa sin haber anotado un solo gol. En este evento el argentino, Diego Armando Maradona, anotó en el partido de cuartos de final ante Inglaterra, los dos goles más famosos de la historia de los mundiales: el primero marcado con la mano, la famosa “Mano de Dios” y el segundo tras haber eludido a seis rivales, incluyendo al arquero. Además, en esta justa, Marruecos se transformó en el primer equipo africano en clasificar a la segunda fase de un Mundial. El Estadio Azteca se transformó en el escenario que mayor cantidad de partidos mundialistas ha cobijado con 19 encuentros, además, en su pasto se han disputado dos Finales del Mundo, en las cuales en 1970 Brasil derrotó a Italia y en 1986 Argentina hizo lo propio con Alemania. 90’s: ÉPOCA DE CAMBIOS EN EL MUNDO Y EL MUNDIAL Para Italia 1990, se dio por primera vez el caso de que, en una final, uno de los equipos no lograra hacer goles, pues Argentina perdió contra Alemania 1-0. Además, Pedro Monzón, de Argentina, fue el primer expulsado en la historia de las finales de la Copa del Mundo. Por su parte, Franz Beckenbauer igualó a Mario Zagallo al transformarse en campeón del mundo como jugador y entrenador. Mientras tanto, Holanda e Irlanda finalizaron su participación en la fase de grupos empatando en todas las instancias de desempate, por lo que debieron sortear sus posiciones por medio de una moneda, la suerte envió a Holanda a jugar contra Alemania Federal y la isla irlandesa se midió contra Rumania. La mayor proeza la consiguió el italiano, Walter Zenga, quien mantuvo su arco intacto durante 517 minutos, estableciendo el récord de imbatibilidad para un arquero en una justa mundialista. En 1994, Estados Unidos fue testigo de la hazaña del ruso Oleg Salenko, quien convirtió cinco goles en un solo partido de la fase final del Mundial; esto ocurrió el 28 de junio en la victoria 6 a 1 de Rusia vs Camerún. En el mismo partido, el camerunés Roger Milla se convirtió en el jugador de más edad en anotar un gol en una Copa del Mundo, haciéndolo a los 42 años y 69 días. Como un hecho inédito para Argentina, Diego Maradona fue encontrado positivo en un control de doping y tuvo que abandonar el torneo siendo la máxima figura albiceleste. También fue la primera vez que una Final terminó sin goles, por lo que debió definirse en penales, donde Brasil ganó 3-2 a Italia. En este Mundial la FIFA decidió entregar tres puntos a cada equipo por ganar un partido, emulando lo que hacia la liga inglesa. Para Francia 1998, el número de participantes aumentó de 24 a 32 selecciones, lo que favoreció el número de goles anotados, teniendo 64 partidos. Por su parte, el argentino Gabriel Batistuta se volvió el primer jugador en anotar tres goles en partidos de Mundiales diferentes, en 1994 contra Grecia y en el 98 contra Jamaica. Además, por primera vez la Final fuera dirigida por un árbitro africano, el honor le correspondió al marroquí Said Belqola. También fue la primera vez que un partido se definió por «gol de oro», esto sucedió en octavos de final cuando Francia derrotó 1 a 0 a Paraguay. Como dato curioso,