Por Javier Cardoso / Especiales Argentina ha conquistado en 2 oportunidades la Copa Mundial de la FIFA, esto sucedió en los años 1978 y 1986. Esos momentos en época mundialista traen recuerdos a ex jugadores que vivieron de cerca esos pasajes de la historia, uno de ellos es el director técnico y ex portero del cuadro albiceleste, Luis Alberto Islas, quien integró el plantel sudamericano en México 1986 y fue titular en el evento de 1994 en los Estados Unidos. Islas, recordó junto a Titán Sports, el significado de representar a su país en un mundial, «es difícil explicar con palabras lo que es ser campeón del mundo, porque lo que se siente por dentro es difícil expresarlo, es una satisfacción enorme, yo venía de un subcampeonato mundial juvenil en 1983, entonces México me sienta muy bien, la mejor imagen es cuando levantas la copa del mundo, en verdad es inexplicable porque no es fácil, tienes que jugar contra los mejores, para llegar a jugar un mundial tienes que pasar por muchas situaciones, así que el mejor momento es cuando nos toca levantar el trofeo, es fantástico «. Luis Islas recordó su niñez, «en el 78 no sabía si jugaría al futbol, era un pibe que jugaba cochecitos en la calle, y a los 15 años debutó en el futbol profesional, cuando jugué en México el mundial juvenil me quedé con las ganas de levantar la copa, perdimos la final con Brasil 1 x 0 en el Estadio Azteca y ahí empiezas a soñar y sabes que este es un camino muy largo». Participar en juegos olímpicos (1988), y ganar Copa América (1993) son algunos logros más del ex arquero nacido en Buenos Aires, «es una meta cumplida, es una meta muy importante, pero te soy sincero, todo lo que he logrado como jugador y entrenador lo tengo bien guardado en mis recuerdos, porque vivo mucho el hoy, no vivo del recuerdo, todo está guardado ahí». Estados Unidos 1994 fue el momento de Luis Alberto Islas como titular en la portería de Argentina, ‘la piel se me pone chinita, estar en un mundial es llegar a lo máximo, ponerse la playera de Argentina, es el orgullo y el placer de representar a tu país. En el 94 había un equipo extraordinario, yo no tengo dudas de que si no pasaba lo del doping (Diego Armando Maradona), ese equipo estaba para campeón del mundo como en 1986, teníamos un equipo extraordinario con un Maradona que era de otro planeta, lo que vives en un mundial es fantástico». Diego Armando Maradona y Luis Alberto Islas, fueron compañeros en la cancha y también en un banquillo cuando el «pelusa» fue director técnico, «yo a Diego lo conozco en el 84 con la selección, fuimos compañeros y campeones del mundo, después nos enfrentamos en un par de equipo, dirigimos juntos en los Emiratos Árabes Unidos y en otros lados como en Dorados de Sinaloa donde buscamos el ascenso y mi relación con Diego Maradona siempre fue dentro de un campo de juego, siempre para mi Diego está presente, aunque ahora está descansando en paz con su mamá y su papá, la última etapa en Dorados para mí fue fantástica, para mí fue un placer dirigir con él, pero también era una responsabilidad muy grande, porque lo que genera Diego, nadie lo genera, recuerdo sus abrazos enormes, eran abrazos con fuerza, con pasión, lo quiero mucho y me siento tranquilo en la parte como entrenador porque los equipos funcionaron y yo lo vi feliz». Luis Islas, también recordó lo que era estar en un entrenamiento con Diego Armando Maradona, «tenerlo en el campo, era saber que tenías una diferencia, una ventaja muy importante con el resto, obviamente nosotros teníamos un gran equipo, éramos una selección fantástica, pero teníamos un plus en Diego, si había un partido parejo o cerrado, Diego te lo habría y rompía cualquier sistema defensivo en cualquier momento, verlo era un placer enorme». Otra anécdota que recordó Islas, fue la que vivía con Maradona en el club América en 1986, «terminaba la práctica y en el club América nos quedábamos a entrenar los tiros libres, el pateaba y yo atajaba, entonces no te imaginas lo que da todos los días el pateaba y yo atajaba, me potencia a muchísimo como jugador por la exquisitez que tenía Diego para pegarle al balón, estaba contra el mejor del mundo y lo digo con mucho orgullo, a mi como portero me hicieron muy pocos goles de tiro libre, yo entrenaba con el mejor del mundo, eso no lo olvido jamás y tampoco olvido su humildad como compañero, era de un corazón inmenso, igual si no tenías zapatos él te los regalaba, lo respete mucho». El hoy director técnico, participó en el futbol mexicano como jugador con León y Toluca, Y con Maradona como auxiliar técnico en los Dorados de Sinaloa.