Por Ricardo Valseca / 06-11-22
Pecco Bagnaia se coronó campeón del mundo de MotoGP y le brindó a Ducati el segundo título de su historia. Con 23 puntos de diferencia contra su rival más cercano, Fabio Quartararo, el italiano solo tuvo que cruzar la meta entre los primeros 14 clasificados para convertirse en el primer campeón del mundo italiano desde que Valentino Rossi lo lograra en 2009.
Fabio Quartararo estaba obligado a ganar, pero en las primeras vueltas se vio enfrascado en un lío donde perdió pie y se quedó embotellado entre el pelotón, alejándolo de la victoria. Mientras que Bagnaia cruzó la meta en noveno visiblemente agarrotado y como un manojo de nervios, pues no fue una carrera sencilla, donde Rins controló la prueba desde el arranque, alejándose de Brad Binder y Jorge Martín, quienes completaron el podio.
Este triunfo supone el primero para Ducati desde que Casey Stoner se estrenó en la categoría de las motos pesadas en 2007. Además de que Bagnaia valida la estrategia del fabricante de Borgo Panigale, de centrar los recursos en el desarrollo de su Desmosedici, en vez de en los salarios de sus pilotos. El que comenzó como un año de lo más complicado para el constructor boloñés termina de la mejor manera posible, con la triple corona.