El primer autobús escolar eléctrico se estrenará en la Ciudad de México, este innovador vehículo representa un avance crucial hacia una movilidad más limpia y sostenible, reafirmando el compromiso con el medio ambiente y la reducción de emisiones contaminantes.
UN PASO HACIA LA SOSTENIBILIDAD
El autobús eléctrico de “LiPU by Traxión”, con capacidad para 44 pasajeros, combina tecnología de vanguardia y comodidad. Ofrece una autonomía de hasta 210 kilómetros por carga, frenos regenerativos, asientos reclinables y una carrocería optimizada que garantiza seguridad y confort.
“El lanzamiento de este autobús es más que un logro técnico; es un llamado a la sociedad para asumir el compromiso de transformar nuestra manera de movernos”, comentó Elías Dana, director general de Movilidad de Personas en Traxión.
La iniciativa es parte de la estrategia de sostenibilidad de Traxión, que en 2024 logró evitar la emisión de más de 60 mil toneladas de carbono gracias a la implementación de medidas de eficiencia energética y tecnologías limpias.
BENEFICIOS PARA LA CIUDAD
El autobús escolar eléctrico fue diseñado para operar en el poniente de la Ciudad de México, una zona con alta concentración de tránsito vehicular. La incorporación de esta tecnología promete mejorar la calidad del aire, mitigar el cambio climático y promover un modelo de movilidad sostenible.
En el evento de presentación, Luis Aranda Terrones, Director de Transporte de Carga y Especializado de la CDMX, destacó la relevancia de adoptar vehículos eléctricos en el transporte público para reducir las emisiones de carbono y avanzar hacia un futuro más limpio.
UN FUTURO MÁS LIMPIO
La apuesta de LiPU by Traxión es solo el comienzo. La empresa busca liderar la transición hacia un transporte más eficiente y responsable con el planeta. “Este proyecto nos muestra que el cambio es posible, pero necesitamos el esfuerzo conjunto de toda la sociedad”, concluyó Dana.
La introducción del autobús escolar eléctrico no solo beneficia a los estudiantes y sus familias, sino que también envía un mensaje claro sobre la importancia de la sostenibilidad en la movilidad urbana. Este avance posiciona a la Ciudad de México como pionera en la implementación de tecnologías limpias en el transporte público.