Por Ricardo Valseca / 06-01-23
El Edion Arena de Osaka, Japón fue el recinto que vio a Daniel “Cejitas” Valladares (26-3-1, 15 KO) conservar su título de la FIB en peso mínimo, contra el zurdo japonés Gingiro Shigeoka (8-0, 6 KO), quien desde el principio buscó hacer valer su localía mostrando un combate agresivo y marcando una buena defensa ante los contragolpes del campeón mexicano.
La pelea no tenía a un claro favorito, pues ambos pugilistas mostraban buena velocidad y pegada, por lo que los jueces, hasta el segundo asalto, tenían 19-19 puntos para ambos boxeadores. Sin embargo, un cabezazo en el tercer round puso fin a la pelea, donde el mexicano alegó que no podía continuar por los mareos producidos por el impacto. El médico aconsejó al árbitro parar la pelea y se decretó un No Contest.
Después del combate, Valladares agradeció el apoyo que le mostraron los mexicanos en su primera incursión al extranjero, donde quedó con sensaciones agridulces, “no tuvimos una pelea como la quisimos tener, fue un accidente, un cabezazo, la verdad, los que me conocen saben que me gusta continuar, sacar la pelea”.
Pese a su deseo de continuar, el púgil mexicano expresó que no se sentía bien, “me sentía aturdido, me sentía mareado, yo volteaba a la esquina para decirles que no escuchaba, no entendía lo que estaba pasando, me sentía muy inestable, mi esquina me hacía señas, pero no podía entender que pasaba”.
Subirse al ring representa un reto para todos los boxeadores, sobre todo cuando expones un título mundial, pero la grandeza del guadalupense no se mide sólo en el ring, sino en su humildad de pedir perdón a su público, “si en esta pelea muchos quisieron que se alargara, pero así es el boxeo. Me voy triste porque yo quise demostrar, pero así es el boxeo, por guardias encontradas fue un accidente”.
Pero su mensaje fue contundente, quiere una revancha contra el nipón, pues Valladares considera que “se la merece”. “Yo y todo mi equipo estamos dispuestos a darle la revancha y de antemano, muchas gracias por todo el apoyo”.
El “Cejitas” ya fue al hospital para ser revisado, donde los doctores descartaron cualquier problema mayor, sin embargo, el mexicano no puede escuchar del lado izquierdo y se sigue sintiendo “algo aturdido”.