Por Ricardo Valseca / 21-08-22
En un combate donde Eduardo Báez mostró gallardía y entereza, se pensaba que podía salir vencedor. Sin embargo, Emanuel Navarrete, tuvo que exigirse a fondo y con un golpe certero en la zona epatica, mandó a la lona a su rival, reteniendo así su título mundial pluma de la OMB. Las acciones tuvieron lugar en la Pechanga Arena, en San Diego, California, el pasado sabádo 21 de agosto.
Dentro de su periodo de inactividad más largo desde que ganó su título mundial en diciembre del 2018 (10 meses), Navarrete volvío a ponerse los guantes, pero durante el combate pasó por dificultades en cinco rounds, con una mano lastimada y falto de velocidad, sin embargo, El Vaquero resolvió con una pegada impresionante en la zona blanda, para lograr su trigésima sexta victoria.
Después del combate, Navarrete no se mostró sosprendido ya que “Esperaba este tipo de pelea. Nunca subestimé a Eduardo Báez. Sabía que era un peleador excelente y que pegaba bastante duro. Fue más complicado de lo que yo anticipaba. Pero luego lo agarré con ese golpe y pude terminarlo”.
Para finalizar, puntualizó lo que todo amante del boxeo sabe, el gancho al higado en parte del boxeo mexicano, “Ese fue un golpe muy mexicano. Viene en mi sangre. Y como puedes ver, no tiro mi gancho de izquierda de forma perfecta. Pero ese gancho fue perfecto y viste el resultado porque pocas personas pueden sobrevivir después de ese tipo de golpe.”
Ahora, se especula que Emanuel podria preparase para hacer más defensas de su campeonato o pensar en subir a la división de peso superpluma.
